Por Freddy González
El ahora director de deporte merideño aprovechó la oportunidad para enviar un saludo a todos sus amigos del ciclismo y la fanaticada.
Corría el mes de enero de 1994 y en aquel momento el aún muy joven Carlos Maya ya comenzaba a demostrar su extraordinario nivel sobre su caballito de acero. El hoy en día director de deporte del Gobierno merideño, desempolvó para exhibir nuevamente a la fanaticada su amada “ave negra”, nombre de la bicicleta con la que en aquel año se convertiría en el máximo ganador de etapas en una misma Vuelta al Táchira con cinco, además subcampeón de ese giro fronterizo.
El llamado cacique del ciclismo, por estos días algo nostálgico ante la ausencia que le representa ya estar retirado y no poder correr la Vuelta al Táchira, aprovechó la oportunidad para fotografiarse con aquella querida cicla, llamada “ave negra” por sus compañeros de pelotón debido a su color negro compuesta de fibra de carbono.
“La verdad que estos días siempre me generar algo de tristeza, pude correr por 20 años ininterrumpidos, desde el 91 y hasta el 2010, la llamada Vuelta grande de América, y siempre que llega enero se vienen muchos recuerdos a mi memoria, es por eso que estos días encontré y decidí sacar mi bici de aquel 1994 en el que rompí ese record de cinco fracciones en una sola edición, más que nada para compartirlo con la gente que aún me guarda cariño”, comentó oriundo de El Vigía.
Maya, quien hace ya varios años que no sale a rodar ni si quiera “un dominguito” con sus amigos debido a tantas ocupaciones generada por su trabajo al frente del Instituto del deporte merideño, aseguró que aún tiene en la memoria aquellas etapas que logró coronar en ese 1994, específicamente un año antes de su única corona del giro andino en 1995.
“Recuerdo que Alexis Méndez, también de Lotería, aprovechó una fuga del día y me sacó un minuto 30 segundos, sin embargo, de ahí para adelante lo que hice fue ganarle etapas y descontarle tiempo, al final quedó campeón por la ventaja que tenía. Sin embargo, mal no recuerdo vencí en la contrarreloj, el Cristo de Capacho, el circuito Santos Rafael Bermúdez, la llegada a Táriba, y el arribo el último día al Velódromo J.J Mora. Hasta se me eriza la piel sólo rememorarlo”.
Antes de terminar esa añoranza al pasado de aquella añeja y exitosa carrera deportiva, el también máximo ganador de etapas histórico que tiene la Vuelta al Táchira con 13 cantos de gloria, aprovechó la oportunidad para enviar un saludo a todo el pelotón que arrancará este próximo 13 de enero la 52 edición de la carrera, “conservo aún muchos amigos en el pelotón y por eso quisiera enviarles un gran saludo, que afronten la gala fronteriza con mucha pasión pero sobre todo mucho cariño, que se dejen querer de la gente y que vivan con intensidad esos momentos de amor de la gente, ya que luego cuando uno se retira y guinda las zapatillas, todos sabemos que todo ese cariño se disminuye considerablemente, así que, ánimo muchachos y a gozarse esa Vuelta grande de América”.
Corría el mes de enero de 1994 y en aquel momento el aún muy joven Carlos Maya ya comenzaba a demostrar su extraordinario nivel sobre su caballito de acero. El hoy en día director de deporte del Gobierno merideño, desempolvó para exhibir nuevamente a la fanaticada su amada “ave negra”, nombre de la bicicleta con la que en aquel año se convertiría en el máximo ganador de etapas en una misma Vuelta al Táchira con cinco, además subcampeón de ese giro fronterizo.
El llamado cacique del ciclismo, por estos días algo nostálgico ante la ausencia que le representa ya estar retirado y no poder correr la Vuelta al Táchira, aprovechó la oportunidad para fotografiarse con aquella querida cicla, llamada “ave negra” por sus compañeros de pelotón debido a su color negro compuesta de fibra de carbono.
“La verdad que estos días siempre me generar algo de tristeza, pude correr por 20 años ininterrumpidos, desde el 91 y hasta el 2010, la llamada Vuelta grande de América, y siempre que llega enero se vienen muchos recuerdos a mi memoria, es por eso que estos días encontré y decidí sacar mi bici de aquel 1994 en el que rompí ese record de cinco fracciones en una sola edición, más que nada para compartirlo con la gente que aún me guarda cariño”, comentó oriundo de El Vigía.
Maya, quien hace ya varios años que no sale a rodar ni si quiera “un dominguito” con sus amigos debido a tantas ocupaciones generada por su trabajo al frente del Instituto del deporte merideño, aseguró que aún tiene en la memoria aquellas etapas que logró coronar en ese 1994, específicamente un año antes de su única corona del giro andino en 1995.
“Recuerdo que Alexis Méndez, también de Lotería, aprovechó una fuga del día y me sacó un minuto 30 segundos, sin embargo, de ahí para adelante lo que hice fue ganarle etapas y descontarle tiempo, al final quedó campeón por la ventaja que tenía. Sin embargo, mal no recuerdo vencí en la contrarreloj, el Cristo de Capacho, el circuito Santos Rafael Bermúdez, la llegada a Táriba, y el arribo el último día al Velódromo J.J Mora. Hasta se me eriza la piel sólo rememorarlo”.
Antes de terminar esa añoranza al pasado de aquella añeja y exitosa carrera deportiva, el también máximo ganador de etapas histórico que tiene la Vuelta al Táchira con 13 cantos de gloria, aprovechó la oportunidad para enviar un saludo a todo el pelotón que arrancará este próximo 13 de enero la 52 edición de la carrera, “conservo aún muchos amigos en el pelotón y por eso quisiera enviarles un gran saludo, que afronten la gala fronteriza con mucha pasión pero sobre todo mucho cariño, que se dejen querer de la gente y que vivan con intensidad esos momentos de amor de la gente, ya que luego cuando uno se retira y guinda las zapatillas, todos sabemos que todo ese cariño se disminuye considerablemente, así que, ánimo muchachos y a gozarse esa Vuelta grande de América”.
Fuente: ve.ciclismototal.net